Paseo por la calle con mi mascota, tranquilo, recuperándome del calor del día a estas horas de la noche. Acabo de leer una noticia que ya conocí está tarde, el fallecimiento de Ignacio. Paseo tranquilo, como lo estaría Ignacio al volver de patinar. Paseo recuperándome del calor del día con mi amigo Wando, como lo haría Ignacio cuando terminó de patinar con sus amigos. Parece que me parezco a él, pero no me parezco. Pocos son como él, muy pocos. Pero por fortuna, aunque no para él sino para nosotros, todavía podemos decir que hay honor, arrojo, coraje y valentía. Eso no ha sido una sorpresa para sus padres y hermanos, familiares y amigos. Quien es así, no lo es de pronto, lo ha sido siempre. Descansa en paz Ignacio.
PD: Tengo la suerte de conocer personalmente a uno. Esto también va por ti, Álvaro.
Las ilustraciones como éstas se están convirtiendo en una forma de expresar un sentimiento de los ilustradores, pero también un sentimiento popular. Yo me hago eco de ese sentimiento. Aquí las últimas ilustraciones de dibujantes españoles muy conocidos.
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